- Añada
- 2020
- Crianza
- 6 meses
- Tipo de Uva
- Cariñena
Garnacha
Un grupo de amigos viticultores apasionados por el terruño y las variedades autóctonas han creado Terra de Falanis, un proyecto que ya ha dejado su huella en bodegas tan interesantes como Ánima Negra en Mallorca.
En Montsant (Tarragona), han aprovechado el potencial de la uva cariñena local y la han combinado con un 30% de garnacha para crear Llenca Plana. Este vino es el resultado de una escrupulosa selección de uvas y una interpretación moderna de la tradición. El vino tiene un cuerpo intenso, es fresco, frutal y lleno de matices.
- Añada
- 2020
- Crianza
- 6 meses
- Tipo de Uva
- Cariñena
Garnacha
En el año 2009 la bodega Ànima Negra, que nació en 1994 en Mallorca, decide crear una nueva línea de vinos con el fin de expresar unas características técnicas y conceptuales diferentes a las que hasta ahora tenían.
Así surgió el proyecto Terra de Falanis, de unos viñedos que, por su carácter, variedad y terruño no encajaban con los vinos de Ànima Negra, aunque el concepto de trabajar con variedades autóctonas y desarrollar una viticultura natural seguía siendo la esencia principal de ambos.
Terra de Falanis, que recibe el nombre que el historiador Miquel Barceló (Pereió) utilizaba para referirse a su pueblo Felanitx, pretende que sus vinos sean de carácter mediterráneo y por ello no sólo tienen vinos elaborados en Mallorca sino que abren la posibilidad de ampliar la gama de sus productos a otras zonas con influencia del Mediterráneo como Montsant o Costers del Segre.
Los vinos Terra de Falanis intentan expresar sus orígenes y transmitir autenticidad, pero sobre todo, lo que pretenden es no complicar al consumidor. Por eso sus vinos son jóvenes, afrutados, o en una palabra, son vinos fáciles hechos para disfrutar, celebrar y compartir.
La estética de sus etiquetas va en consonancia con lo que se quiere transmitir gracias a las decoraciones sofisticadas de la imagen, creadas por el dibujante de cómics y guionista mallorquín, Pere Joan, y al uso de onomatopeyas, que intenta ser un recuerdo a los orígenes y a la simplicidad del lenguaje imitando sonidos espontáneos de nuestro entorno.