- Variedades: 70% Cariñena, 30% Garnacha
- Elaboración y crianza: La selección cuidadosa de la uva es primordial para ofrecer este vino tan característico y singular. La producción del vino va en función de las circunstancias de la cosecha, de las técnicas de vinificación y de la selección de las barricas más especiales. El objetivo es producir el mejor vino posible. La fermentación se realiza en depósitos de acero inoxidable de 10.000 litros durante 6 días a una temperatura controlada de 25 °C. El tiempo medio de maceración es de 10 días y el envejecimiento es de 6 meses en barricas de roble francés y americano utilizadas por segunda y tercera vez.
- Notas de cata: Un vino complejo y con mucho cuerpo que concentra notas de fruta en la nariz y explosiona en la boca en una combinación fresca, rica y dinámica. Con un final interesante, este vino supone un reto para todos aquellos que se atrevan a descifrar el código de matices que se esconden.
En el año 2009 la bodega Ànima Negra, que nació en 1994 en Mallorca, decide crear una nueva línea de vinos con el fin de expresar unas características técnicas y conceptuales diferentes a las que hasta ahora tenían.
Así surgió el proyecto Terra de Falanis, de unos viñedos que, por su carácter, variedad y terruño no encajaban con los vinos de Ànima Negra, aunque el concepto de trabajar con variedades autóctonas y desarrollar una viticultura natural seguía siendo la esencia principal de ambos.
Terra de Falanis, que recibe el nombre que el historiador Miquel Barceló (Pereió) utilizaba para referirse a su pueblo Felanitx, pretende que sus vinos sean de carácter mediterráneo y por ello no sólo tienen vinos elaborados en Mallorca sino que abren la posibilidad de ampliar la gama de sus productos a otras zonas con influencia del Mediterráneo como Montsant o Costers del Segre.
Los vinos Terra de Falanis intentan expresar sus orígenes y transmitir autenticidad, pero sobre todo, lo que pretenden es no complicar al consumidor. Por eso sus vinos son jóvenes, afrutados, o en una palabra, son vinos fáciles hechos para disfrutar, celebrar y compartir.
La estética de sus etiquetas va en consonancia con lo que se quiere transmitir gracias a las decoraciones sofisticadas de la imagen, creadas por el dibujante de cómics y guionista mallorquín, Pere Joan, y al uso de onomatopeyas, que intenta ser un recuerdo a los orígenes y a la simplicidad del lenguaje imitando sonidos espontáneos de nuestro entorno.