Las cepas de Garnacha del valle de Secastilla, formadas en vaso, se vendimiaron de forma manual a finales de septiembre.
A pie de viña llevamos a cabo el despalillado, encubado y refrigeración de la uva, para, posteriormente, hacer una maceración prefermentativa que duró tres días.
La fermentación se desarrolló a una temperatura siempre inferior a 25ºC, y el vino resultante se introdujo en barricas nuevas de roble francés para una crianza de diez meses.
Finalmente, el vino fue embotellado en mayo de 2014.